Seguro que te has preguntado durante estos meses: ¿sigue siendo un buen momento para vender? Es una pregunta normal, ya que los tipos de interés hipotecario y los datos que salen en las noticias no son del todo halagüeñas. Pero en Housell vamos a darle un poco de perspectiva a esos datos que has visto en la tele o leído en los titulares de prensa para que veas que la situación no es tan áspera como se pinta y que sigue siendo un momento muy dulce para vender una casa:
Los últimos datos del INE (Instituto Nacional de Estadística) indican que sí. Es más, que en abril se ha reducido un 20,7% con respecto a abril de 2022. Pero conviene indicar dos cosas:
Lo mismo, en marzo de este año si lo comparamos con el de 2022 vemos un descenso del 15% en hipotecas firmadas. Huelga decir que es obvio que el tipo de interés influye mucho en este dato, pero aún así el nº de firmas hipotecarias sigue por encima de las que había entre 2015 y 2020. Así que sigue siendo un dato muy positivo.
Que el Euríbor ha subido de forma muy pronunciada en menos de un año es un hecho, pero también lo es que veníamos de unos años en los que el tipo de interés era incluso negativo, algo que es muy poco común y que, cuando sucede, obviamente no permanece así mucho tiempo.
Y aunque ese 4% nos parezca mucho, vamos a volver a hacer uso de la perspectiva y ver que, en los últimos 25 años, el euríbor ha estado en ese 4% seis veces y no ha pasado nada. Es normal y aunque frene el nº de compraventas, no estamos hablando de descensos alarmantes, sino todo lo contrario.
El precio de la vivienda ha subido en el primer trimestre del año alrededor de un 3,5% con respecto al año pasado, pero ya está creciendo a un nivel más moderado que hace unos meses. ¿Es bueno para ti que tienes una casa a la venta? Sí y no. Te lo explicamos.
Que el precio siga creciendo significa que, aunque el euríbor siga alto y el nº de compraventas haya bajado, la demanda sigue siendo superior a la oferta. Esto, a priori, es bueno para el vendedor. Pero si el comprador empieza a tener dificultades de financiación y sigue “encareciéndose” el acceso a una vivienda, un precio elevado puede hacer que los compradores se retiren de la búsqueda de casa, lo que perjudica directamente a la otra cara de la moneda. Es decir: a ti.
Estamos en junio, acercándonos a julio, dos meses con bastante actividad en cuanto a nº de compraventas antes del parón veraniego. Así que teniendo en cuenta esto te recomendamos:
Dicho esto, tomar buenas decisiones antes de que llegue la segunda quincena de julio, que es cuando empezará a frenarse el ritmo del mercado hasta mediados de septiembre, puede ayudarte a dejar bien encaminada la venta de tu casa e irte, tú también, tranquilo a la playa o a la montaña.